La Junta se suma a las restricciones de movilidad propuestas por el Ministerio de Sanidad
Noticias Aranda
Castilla y León se unía en la tarde de ayer, en reunión telemática del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud, a las nuevas medidas que el Ministerio de Sanidad ha propuesto en la Declaración de actuaciones coordinadas en Salud Pública para responder a la situación de especial riesgo derivada del incremento de casos positivos por la COVID-19. “Estas medidas suponen la adopción de estándares mínimos para el conjunto español con el objetivo de minimizar el riesgo de expansión de situaciones epidemiológicas graves entre territorios, no sólo en cada CC.AA. sino también entre comunidades”, afirman desde la Junta.
Por ello y sin perder de vista la necesaria implementación de medidas preventivas y de contención social con independencia del tamaño de las poblaciones, el Ministerio de Sanidad ha propuesto actuaciones con especial atención para con núcleos de población por encima de los 100.000 habitantes. La propuesta ministerial expresa, como criterios generales para la toma de decisiones en esos municipios con importante peso demográfico, una incidencia de 500 casos de la COVID-19 o más por cada 100.000 habitantes; un 10% de positividad respecto al número de test PCR realizados; y un rango de ocupación UCI por encima del 35 %. En este sentido, la consejera de Sanidad de la Junta de Castilla y León, Verónica Casado Vicente, ha reiterado la necesidad de disponer de mecanismos especiales de intervención que, adoptando criterios epidemiológicos y recursos administrativos y jurídicos, faciliten asimismo una respuesta rápida y efectiva para controlar contagios en municipios por debajo de esa población. Para la responsable sanitaria castellana y leonesa, el documento ahora aprobado es un texto de mínimos que queda abierto a introducir nuevos indicadores que faciliten una unidad de acción y criterios comunes.
Por otra parte, sobre la reducción a seis personas de la participación en grupos sociales, salvo entre convivientes, la evidencia empírica referida al ámbito de ocurrencia de los brotes existentes señala que, en su mayoría, éstos tienen un carácter social, relacionado con reuniones familiares y amigos; en este sentido, esta medida pretende disminuir esta interacción en personas no convivientes. La limitación de aforos en distintos ámbitos y sectores pretende garantizar un distanciamiento interpersonal en los espacios en los que se concurra, siendo esta medida una de las más eficaces para evitar la transmisión, junto con la higiene de manos y el uso de la mascarilla.
El horario de cierre de establecimientos, locales comerciales y servicios abiertos al público forma parte también de las medidas preventivas de contención incorporadas a las actuaciones coordinadas y persigue reducir el riesgo de transmisión, evitando o limitando la posibilidad de contagio en contextos y situaciones sociales que han demostrado ser importantes focos de transmisión.